La clave de la concesión de nuevos carnets de conducir o sus correspondientes renovaciones estará en el reconocimiento médico que es indispensable completar para poder obtener la licencia correspondiente. Por ello, desde estos centros serán mucho más rigurosos, rechazando a conductores que padezcan ciertas enfermedades diagnosticadas o que estén bajo una medicación específica que pueda interferir de manera clara a la hora de circular con sus vehículos.
La idea es que una vez se presente el historial médico sea analizado de forma personalizada, porque una misma enfermedad puede afectar con distintos grados a cada persona. Incluso algunos podrán conseguir la licencia si su médico especialista les hace una autorización como que pueden conducir sin ser un peligro para el resto de la sociedad.
LAS ENFERMEDADES CON LAS QUE NO SE RENOVARÁ EL CARNET DE CONDUCIR EN 2025
Accidente isquémico transitorio
Alzheimer
Aneurisma de grandes vasos
Apnea del sueño
Arritmias
Crisis o pérdida de conciencia
Demencia o trastorno de ansiedad
Depresión
Desfibrilador automático
Diabetes mellitus insulinodependiente
Disección
Dolencias oncológicas
Enfermedades cardíacas
Enfermedades degenerativas, neurológicas y crónicas
Enfermedades digestivas
Enfermedades endocrinas
Enfermedades neurológicas
Enfermedades oncológicas
Enfermedades respiratorias
Epilepsia
Esclerosis lateral amiotrófica
Hipotiroidismo y paratiroides
Infarto agudo de miocardio
Marcapasos
Nefropatía con diálisis
Parkinson
Problemas vasculares
Prótesis valvulares
Trasplante renal
Trastorno de la personalidad
Trastorno del desarrollo intelectual
Trastorno obsesivo-compulsivo
Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH)
Trastornos del sueño
Trastornos oncohemáticos