"Creía que había ligado con un apuesto colombiano y acabó desquiciada, exasperada y despechada porque el hombre no quería mantener relaciones sexuales con ella. La mujer de 48 años encerró en su piso al individuo, que acababa de conocer en un bar, y le amenazó presuntamente con clavarle una jeringuilla con cianuro si no satisfacía sus deseos libidinosos.
La detención ilegal, que tuvo lugar el 2 de noviembre en una vivienda de Valencia (cerca de la calle Santos Justo y Pastor), obligó a intervenir a la Policía Nacional después de que la víctima llamara al 112 para pedir socorro. Varias patrullas acudieron con urgencia al lugar y lograron liberar al hombre, que estaba muy asustado. Dos policías entraron por una ventana y detuvieron a la mujer tras escuchar las dos versiones de los hechos.
Carlos Mario V. A., de 44 años, explicó a los agentes que había subido a la casa de la mujer porque ella se lo propuso tras tomar unas copas en un bar. Una vez dentro de la vivienda, cambió de opinión y decidió marcharse, pero ella cerró la puerta con llave y le dijo que no la abriría hasta que no mantuvieran relaciones sexuales.
Según la declaración de la víctima, su negativa enfureció a la mujer, que comenzó a gritar y rompió un cristal. También le amenazó con clavarle una jeringuilla con cianuro. Entonces, el hombre se refugió en una habitación y llamó con su móvil al 112 para pedir auxilio. Mientras hablaba por teléfono empujaba la puerta para que ella no entrara, y no salió hasta que dos policías se colaron por una ventana tras saltar un muro. Uno de los agentes rompió su transmisor de forma accidental cuando acudió con celeridad en auxilio de la víctima.
La versión de la mujer es muy distinta. Reconoció que había invitado a subir a su casa al individuo, pero declaró que se enfadó porque lo sorprendió robando. Los policías dieron más credibilidad a las manifestaciones del hombre, que estaba despavorido y muy nervioso cuando fue liberado. Además, la mujer no abrió la puerta de su casa a la policía. Ante semejantes evidencias, los agentes detuvieron a la propietaria de la vivienda por un delito de detención ilegal. Horas después quedó en libertad tras declarar ante el juez de guardia, aunque continúa imputada. La víctima tiene que declarar en el juzgado en los próximos días.