Creo que es hora de que cambiemos nuestra manera de ver la vida y a otras personas, de cambiar ese modelo heteropatriarcal en el que los gordos son los malos de la película. El respeto por encima de todo, chavales.
Que vuestro propósito post confinamiento sea engordar unos kilitos, pero no 3 o 4, mejor que sean 20 o 30.