¿En serio me estás diciendo?
El estado somos TODOS, si éste se ve obligado a ejercer violencia contra nosotros, entonces es que algo falla. La violencia policial, junto con la corrupción es lo más putrefacto a lo que puede llegar un estado. Cuando se alcanzan estos dos factores, los gobernantes que lo hayan permitido deberían DESAPARECER sin más dilación.