El Gobierno descarta adoptar medidas adicionales para evitar que el IVA de la electricidad suba del 10% al 21% a partir del 1 de marzo. Preguntado por esta posibilidad, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha cerrado la puerta a evitar que la factura suba automáticamente un 11% a unos 27 millones de contratos en España el próximo viernes. En una comparecencia tras el Consejo de Ministros, Cuerpo ha señalado que "las medidas que se diseñaron con una condición asociada a la evolución de los precios deben seguir su curso". El Real Decreto-ley 8/2023 contemplaba una subida del IVA del 5% al 10% para los contratos de los consumidores minoristas (aquellos que tienen contratos de luz con una potencia inferior a los 10 kW). Sin embargo, dicha subida esta condicionada a que los precios del mercado mayorista estuvieran por encima de los 45 euros por MWh, según el artículo 21 de este decreto convalidado in extremis en enero. En caso de que estos precios del mercado mayorista bajaran en media durante un mes completo del umbral establecido, a partir de la siguiente facturación posterior a ese mes el IVA a aplicar sería del 21%. Esta circunstancia es la que se ha dado este mes de febrero. Pese a que aún faltan dos días para su conclusión, los precios en media ya están alrededor de los 42 euros por MWh y no van a subir del umbral de los 45 euros por MWh que permite que el IVA esté limitado al 10%, señalan los expertos del mercado eléctrico. El titular de la cartera de Ecoomía ha querido poner el valor el hecho de que estos precios bajen, según señala, gracias a la penetración de las renovables y la apuesta de España por esta tecnología, algo que entiende que es un factor diferencia de precios respecto a Europa.
La mayoría no se benefician del menor precio del mecado
Sin embargo, esta caída del precio mayorista no repercutirá sobre la mayoría de consumidores de luz. La mayoría de contratos en mercado libre (unos 18 millones de facturas), cuentan con un precio fijo anual de la energía, por lo que ahora verán su IVA incrementado sin notar la bajada por la parte del término de energía. Sí que verán reducido en parte el recibo los usuario de la tarifa regulada, del que disfrutan algo menos de neuve millones de usuarios. El Precio de Venta al Pequeño Consumidor (PVPC) está indexado en parte al mercado mayorista, por lo que se beneficia de los bajos precios. No obstante, la reforma del PVPC que entró en vigor en enero hace que la luz esté indexado al conocido como pool solo en parte. Una medida que se adoptó para evitar fuertes subidas como la ocurrida entre finales de 2021 y principios de 2022. La guerra de Ucrania fue el factor decisivo en los precios más altos de la historia de la luz. La caída en media por debajo de los precios del mercado mayorista en febrero, que permitirá la subida del IVA al 21%, se ha producido en gran medida por el temporal de viento de los últimos días, que ha provocado un fuerte aumento de la generación eólica, lo que ha hundido los precios. En los últimos días, el precio del pool ha estado por debajo de 10 euros por MWh en media cada día. Desde una comercializadora de luz confirman que cuando el periodo a facturar termine el próximo viernes, a esa factura se le aplicará un IVA del 21%. Esto significa que entre diez y quince días después, recibirán un recibo con el IVA general en lugar del reducido actual. Si el periodo de facturación es bimensual, el IVA al 21% se aplicará a su factura de dos meses, aunque la mayoría de usuarios son facturados a un mes. En cualquier caso, el ministro de Economía ha señalado que la actual normativa también contempla que si se vuelve a superar en media en un mes los 45 euros por MWh en el mercado mayorista, se volvería a aplicar el IVA reducido del 10%. Sin embargo, actualmente el mercado de futuros apunta que hasta el mes de junio, los precios estarán por debajo de la cota que se aplica para bajar el IVA de 45 euros por MWh. Con este incremento del IVA, el gran beneficiado será Hacienda. Las arcas públicas contarán con un repunte extra de los ingresos. La subida, sin embargo, son un problema para los hogares más pobres. La encuentas de condiciones de vida publicada por el INE este lunes ya advertía que hay un 20% de hogares que no puede tener su vivienda aclimatada adecuadamente por los altos precios. Para ellos, el Gobierno ha aumentado la cobertura del bono social eléctrico y térmico, pero está lejos de cubrir a toda la población que lo necesita, ya que muchos no disponen del mismo por problemas burocráticas o el desconocimiento de que tienen esta posibilidad.
Subida del 20% respecto de diciembre
Desde diciembre, la luz subirá casi un 20% por la recuperación de impuestos. Respecto de marzo de 2023, se aplicará un IVA un 16% superior. Pero además, el impuesto especial sobre la electricidad ha pasado en diciembre del 0,5% al 2,5% en enero. Este tributo se incrementará progresivamente y desde abril pasará a ser del 3,8%. También se ha recuperado el impuesto del 7% sobre la generación, que las empresas trasladan a los consumidores en el término de energía. Los cargos y peajes se han mantenido.
Es curioso que esto salga tras justamente salir hoy la noticia de que hay un buen porcentaje de los españoles que no llega a final de mes y algunos incluso no pueden calentar la casa en invierno.