Está claro que no a todo el mundo le hace falta, pero lo del inglés que se enseña en España es criminal. Si hasta en filología hay gente que acaba (y no poca) con un nivel que dan ganas de llorar. Luego trabajas en una empresa internacional, te cruzas con el español de turno y tardas media palabra en reconocerle.
Y todo eso al final hace mucho daño al país, ya que genera una idea sobre los españoles que es la que es. Un país con gente tan bien preparada en sectores clave como medicina o ingenierías, y que sin embargo, por el efecto halo invertido, nunca se reconocerá como debería.