#89 Pero no te das cuenta de que los que tradicionalmente han llamado posmodernos a los postestructuralistas han sido los adversarios ideologicos del postestructuralismo para intentar denostar sus postulados? Y aunque algun postestructuralista se consideraba posmoderno, la mayoria de ellos se autodefinian como modernos.
Son escuelas distintas pero que convergen en un mismo fin, que es la relativización de todo sistema habido y por haber. Es como si te digo que tanto los panteístas como los teístas convergen de maneras distintas pero a la vez comparables en cuanto a elucubrar una figura divina, pero aplicado en este caso a dinámicas y estructuras sociales. La corriente postmoderna puede incluir perfectamente a los postestructuralistas en cuanto a objetivos, como en cuanto a que comparten similitudes teóricas. A eso intento llegar.
Yo no se si tu eres de derechas o de izquiedas, y tampoco me importa. Yo estaba haciendo referencia al texto expuesto y la teoria que sostiene, que me parece evidente que nace en sectores de derechas y que la gran mayoria de sus defensores son de derechas, o son esa gente que se considera de izquierda pero que suele coincidir en casi todo con la gente de derechas, al estilo Perez Reverte.
La derecha o la izquierda no la puedes medir de forma comparativa, que es lo que estáis haciendo quienes caéis en esta falacia de apropiación: como la derecha usa mucho ese discurso, a veces incluso para desestimar cosas que sí son legítimas, pues entonces el discurso es inmediatamente de derechas, ¿no?
Pues no. La apropiación de un símbolo o un discurso es caer en idealismos y no entender cuál es el propósito del debate. La crítica a la filosofía postmoderna, su constante intento por relativizarlo todo y apelar a simbolismos e idealismos, viene dada sobre todo por la filosofía materialista, que es justamente la que mantiene un constante feedback loop con respecto a la ciencia — la herramienta que mejor nos ha sevido hasta ahora para desentrañar la realidad, entenderla, y permitirnos ahora mismo escribirnos a grandes distancias. Y gracioso es el hecho de que justamente, el materialismo y la ontología realista son marcos teóricos tradicionalmente apelados por la izquierda, huyendo de la perspectiva idealista de la derecha (como siempre hizo ésta a través de Dios, a través de nacionalismos, tradicionalismos...).
Lo que pasa es que en este mundo, todo el mundo aprovecha toda arma en contra de su adversario. Y por supuesto, la derecha tiene un buen arma contra la izquierda tricornio haciendo crítica al postmodernismo, pero te invito a que busques cuentas fachitas en Twitter y otros lados para entender cuál es su vector de crítica, y verás como es fundamentalmente distinto del que aquí te comento (o del que verás por parte de sus análogos en la izquierda). Ellos suelen quejarse de la conexión que existe entre la Teoría Crítica y las ideas marxistas, o suelen mismamente tratar de decir que el ensimismamiento identitario de esta izquierda es debido a que es marxista (algo que decía Peterson y se equivocaba al establecer tal conexión).
Y es que estos "derails" teóricos se dan en todos lados, no sólo en la crítica a lo posmo. Es como si cojo yo ahora, y te hago un strawman como una casa con el feminismo: lo trastocaré tanto, que al final quedará una versión irrisoria de éste, fácil de criticar y de odiar, cuando su realidad es bien distinta y su objeto de crítica alberga mucho componente real y legítimo.
En cuanto a la respuesta que le diste al twittero me parece que es una critica que puede atribuirse a multitud de corrientes modernas de la misma forma, ¿o es que acaso no es simplista decir que los burgueses sistematicamente oprimen a los proletarios por una cuestion material como es el patrimonio? Y esto es estructuralismo basico, pero hay montones de contraejemplos, como por ejemplo el de Robert Owen, burgues y padre del cooperativismo. El problema no es la teoria sino los fanaticos que caricaturizan esas teorias. Cualquier persona con dos dedos de frente sabe que ser un burgues no necesariamente te hace ser un opresor, de la misma forma que ser homosexual no te hace tener dificultades sociales añadidas obligatoriamente; pero de la misma forma cualquier persona coherente sabe que ambas cosas hacen mas probable esos hechos. Por que al fin y al cabo tanto el estructuralismo como el postestructuralismo no son teorias absolutas sino mas bien modelos que nos sirven para entender ciertos comportamientos sociales, entendiendo tambien que los comportamiento sociales no son estructuras rigidas que siempre ocurren de la misma forma.
El problema, es que sí que hay gente que lo ve así, gente que establece una suerte de maniqueísmo excesivamente básico e insulso donde la identidad de cada persona (raza, sexo, sexualidad...) importa más que las ideas o argumentos que se dan. Por eso varias veces en este hilo y otros menciono que la Teoría Crítica se ha ido de madre: empezó bien encontrando relaciones opresivas como la que aquí comentas (y tantas otras), pero terminó yéndose de madre, radicalizándose, y pasando a aplicar esto como una regla general que se aplica a todo. Esto nos lleva de nuevo atrás, al tema postestructuralismo vs postmodernismo, donde si bien el primero no trataba de objetivizar análisis alguno, el segundo sí lo hace, paradójicamente escidiéndose del cariz crítico que suscitó el análisis crítico que llevó a dicha acción.
Y de la misma forma que decir que todo es un constucto me parece de un fanatismo anticientifico, decir que toda estructura de poder es material me parece igualmente anticientifico, como si los convencionalismos sociales no pudieran ser germen de desigualdad. Bajo este ultimo supuesto podriamos llegar a decir que la homofobia no existe o que no es algo aprendido en sociedad (y por tanto estructural, aunque no absoluto a todos los individuos como es obvio para cualquier persona razonable).
Todo es material, teniendo en cuenta por supuesto los emergentismos. Eso en ningún momento legitima acción alguna; eso sería caer en falacias tradicionalistas. La famosa idea de que la ciencia oprime, en realidad no es más que un rechazo a la realidad como factor limitante en nuestra experiencia, que muchos tratan de racionalizar basándose en los tiempos de la frenología. Partir de una perspectiva racionalista, que use tanto las herramientas de la filosofía (ética, lógica, epistemología, ontología) como la ciencia, es algo perfectamente válido y conciliable con una sociedad que es crítica consigo misma y que busca hacerse mejor con el tiempo. De hecho, me atrevo a decir que es el único camino a hacerlo bien, y a que luchas como la LGTB, feminismo, postcolonialismo y demás, de verdad logren ser efectivas y lograr una situación mejor para todos.